El hierro se afila con el hierro, y el hombre en el trato con el hombre.
Proverbios 27:17 muestra de manera clara que los creyentes no pueden crecer solos. Un creyente necesita de otros para su fortalecimiento, edificación y gozo. En la Iglesia fomentamos las instancias en que cada persona se une o se vincula con grupos de servicio, comunión o estudio de la palabra de Dios. Desarrollamos una serie de actividades semanales que permiten a los creyentes estar en contacto con otros y servir juntos en el Reino de Dios.